Cuando la piel está irritada o con un eczema, generalmente pica mucho, lo que nos lleva a rascarla, lo que puede romper la piel y favorecer la aparición de infecciones.
Para evitar la aparición de problemas en nuestra piel, paso a exponer varias recomendaciones para tratar pieles con eczemas o irritaciones:
- Utilizar duchas (no baños) cortos y con agua tibia (no muy caliente).
- No utilizar esponjas o guante de crin en las zonas afectas.
- No secarse frotando la piel sino «en toques».
- Si la piel está irritada, no aplicar crema hidratante hasta que haya desaparecido la irritación si no, picará más).
- Cortar las uñas corta para no romper la piel al rascarse.
- Al resolverse la irritación, hidratar bien la piel para devolverla a sus condiciones iniciales («para que quede como estaba al principio»).
- Evitar las ropas con lacra o lana (mejor lino y/o algodón).
- No utilizar ningún producto de tratamiento hasta que no se tenga un diagnóstico claro y seguro (si es necesario, acuda a su dermatólogo).
- Aplicar fomentos de manzanilla fría (descongestivos) varias veces al día en la zona.