La mayoría de cosméticos con este derivado de la vitamina A tienen en concentraciones bajas, por lo que pueden adquirirse libremente. Sin embargo, para evitar efectos adversos es mejor acudir a dermatólogos y médicos estéticos antes de iniciar tratamientos con retinol.
El retinol suele ser ingrediente principal de varios productos para la piel, tales como:
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• Aceites para el cuidado de la piel. Entre sus propiedades destacan la mejora de estrías y manchas, disminución de cicatrices y regeneración de la piel quemada.
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• Cremas. Proveen una sensación de suavidad, disminuyen las líneas de expresión, estimulan la producción de colágeno y ácido hialurónico.
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• Sérum facial. Una base hidratante de textura ligera que cuenta con una alta concentración de ingredientes activos de rápida actuación, ideal para complementar la acción de las cremas de día y de noche.