El cáncer de piel (melanoma) es, junto con el de páncreas, de los más letales. Sin embargo, si se diagnostica y se trata precozmente, los pacientes pueden considerarse clínicamente curados, aunque tengan que seguir los controles posteriores con su dermatólogo de referencia. 

Las revisiones deben hacerse con más motivo es pacientes con las siguientes características:

- Antecedentes familiares o personales de cáncer de piel.
- Fototipos bajos (piel clara) o/y ojos claros.
- Exposición solar amplia (por trabajo u ocio).
- Antecedentes de quemaduras solares en la infancia.
- Presencia de más de 50 lunares en el cuerpo.

Los signos que nos indican que un lunar tiene signos de alarma (que debe ser valorado por un dermatólogo) son los del ABCDE.

1. Asimetría (si un lunar es simétrico y se vuelve irregular en el tiempo).
2. Bordes (si los bordes son inicialmente nítidos y se van perdiendo con el tiempo).
3. Color: si el color va aumentando o disminuyendo en alguna zona concreta del lunar o en su totalidad
4. Diámetro: generalmente los lunares problemáticos suelen ser mayores de 5 mm.
5. Evolución: si un lunar se sobrelleva, pica o sangra, o se ulcera sin ningún motivo. 

Siempre recomiendo a los pacientes revisar sus lunares antes de empezar a ir a la playa (antes del verano), para valorarlos y asegurarnos que no haya ninguna lesión de riesgo que nos pueda dar problemas con la exposición solar. En DermaTenerife, además, disponemos del sistema de dermatoscopia digital Handyscope, que permite evaluar los cambios. Si quieres revisar tus lunares sólo tienes que llamarnos al 922 151539. Porque prevenir es mejor que tener que tratar